Cuando hablamos de embarazo de riesgo nos referimos a aquel en el que existe una probabilidad mayor de la habitual de muerte o desarrollo de algún tipo de patología en el futuro bebé o en la gestante antes del parto.
Posibles factores desencadenantes de un embarazo de riesgo
Son muchos y muy variados los factores que pueden inducir a que un embarazo sea de riesgo. Para conocer qué puede causarlo y qué precauciones tomar, desde Clínica Obispo, su centro ginecológico en Vigo de confianza, hemos elaborado para usted esta breve guía con todo lo que necesita conocer sobre los embarazos de riesgo.
La edad de la madre
La edad de la madre es uno de los factores más habitualmente considerados de riesgo potencial en el embarazo. Una gestante menor de quince años tiene mayor riesgo de desarrollar eclampsia y preeclampsia (un aumento de la presión arterial, proteínas en la orina y retención de líquido durante el embarazo).
No obstante, las mayores complicaciones potenciales se atribuyen a gestantes mayores de 35 años, en las que aumenta el riesgo de presión arterial, diabetes gestacional, complicaciones en el parto, complicaciones con la anestesia, fibromas o anomalías cromosómicas en el feto.
La complexión de la gestante
La complexión de la gestante también es determinante en estos casos, ya que si la futura madre tiene un peso inferior a 45 kg corre el riesgo de dar a luz un bebé con bajo peso. En contrapartida, una gestante que padezca obesidad puede dar a luz a un bebé con demasiado peso y aumentan sus probabilidades de desarrollar diabetes gestacional.
El grupo sanguíneo
La relación entre el RH de la gestante y el bebé también es un factor determinante para conocer si el embarazo será o no de riesgo.
Patologías previas en la gestante
Las madres que sufran anomalías en los ovarios o en el útero tienen mayor riesgo de experimentar partos prematuros, posiciones anormales del feto, complicaciones en el parto y hasta abortos.
Por su parte, son enfermedades potencialmente riesgosas en la gestante las enfermedades renales, la diabetes, la cardiopatía, las enfermedades de la glándula tiroides, la hipertensión arterial, las enfermedades autoinmunes o las enfermedades respiratorias, entre otras.
Procesos teratogénicos
Si la madre recibe tratamientos que necesiten radiaciones (rayos X, UVA, UVB), sufre alguna infección (por herpes, parvovirus, rubeola, varicela, sífilis, lupus o toxoplasma), así como si lleva un estilo de vida poco saludable, con la ingesta de alcohol, el empleo de tabaco u otras sustancias tóxicas, como la cocaína, todo ello podría interferir en el potencial desarrollo del feto y causarle anomalías.
Si usted cree que puede padecer un embarazo de riesgo y necesita un asesoramiento adecuado antes de comenzar la gestación, para poder hacerlo con todas las garantías, no dude en contactar con Clínica Obispo, su centro ginecológico en Vigo de confianza.